miércoles, 14 de agosto de 2024

Noli Me Tánguere, Exposición individual de Ricardo Orduz Ordóñez. Agosto 28 a septiembre 24 de 2024.


 


“Morir justifica el error de haber nacido”, rezaba en un pequeño papel; debajo del vidrio de la mesa de lectura, en la biblioteca de la universidad, eso, hace ya casi cuarenta años; estaba escrito con tinta roja, su tipología mostraba esmero y un verdadero interés para que fuese visto; a pesar de su tamaño.


“Morimos cuando no despertamos”, “solo muere a quien se olvida”, “nacer es comenzar a morir”, “morir es nacer a la eternidad”; etc. (podría escribir un enorme libro sobre frases y comentarios de poetas, novelistas y demás escritores respecto a este tema, y otro, similar, o más extenso, de opiniones de la gente común).


La muerte es un tema emocional, ante todo, que muestra una faceta extraña del ser humano; extraña por sus infinitas interpretaciones y reacciones ante ella; la muerte es un vacío, es la expresión de la no presencia, que en la mayoría de las ocasiones afecta la costumbre del constante vivir. 


¿Has pensado en morir o en la muerte?... Yo sí, pero en morir; nunca en la muerte, como tal; y aunque muy pocas veces ha llegado a mi entorno familiar, he sentido su dura y trascendental presencia.


NOLI ME TANGUERE, es un pasaje bíblico que habla de la promesa de la resurrección, la verdadera, la original, la única “corroborable”; momento en el cual Jesús resucitado emprende el abandono de su ser mortal; que finalmente es la verdadera resurrección, no las otras sucedidas.


Como creyente independiente, he oído, sin interés real alguno, al igual, creo, lo han hecho quienes se entregaron de lleno a las envolventes convicciones religiosas, sobre la resurrección, que viene siendo el verdadero objetivo del ciclo de la vida-muerte; pero no basta, la pérdida de un ser querido, es real, palpable, nos lleva, si no a cuestionarnos, si al menos a entender que formamos parte de un todo, que sin saber cuándo ni cómo : Nos hará  protagonistas de ese momento; adjunto a los atenuantes y agravantes de que tal fuimos en vida( acudiendo a las citas religiosas).


La exposición “NOLI ME TANGUERE”, es una serie de fotografías que muestra cómo los elementos ambientales, aunados a la indiferencia, a la falta de mantenimiento, crean superficies, texturas, tonos; espacios que nos hablan de la dejadez, del olvido; que interpreto, por su connotación funcional y contenido emocional como símbolo del desamor, de la promesa no cumplida, del sentimiento pasajero, del mal deber cumplido; del dolor de la realidad entendida, pero no consciente.


Cuando morimos, la vida, que, a pesar de todo, tiene que seguir: Nos vuelve olvido: No recuerdo; OLVIDO, que viene siendo consecuencia de la rutina humana, que nos obliga a continuar, sin darnos tiempo a sentir la ausencia, ni siquiera en momentos de soledad.


Por último, me queda la inquietud: ¿El olvido nos ayuda a superar el dolor?

































Estudié arquitectura, no artes plásticas; quizás por eso disfruto de la libertad de hacer; no sé si torpemente, quizás sin fundamentación, para los “entendidos”; rompiendo “sacrílegamente” las normas que obligan a seguir caminos establecidos para ´poder así, avanzar, para poder expresar, para poder encajar; no sé, pero si existe un sentimiento que resuma mi vida como artista es: la LIBERTAD.

Es importante mencionar que escribo desde los muchos años, años que el tiempo ha venido depositando en mi (nací en Bucaramanga, en abril del 65), luego mis comentarios son fruto de una decantación emocional larga; quizás aburrida y abrumadora.


Soy un convencido de que el artista, el verdadero artista: crea y trasforma; no aprende, me refiero a aprender de fuentes externas(enseñanza); el verdadero artista es experiencial y experimental, basado en su instinto; Creo, y me disculpan la falta de modestia, tengo mínimamente el “Don” para serlo; por eso mi trabajo nunca a sido quedarme en lo que “da”, económicamente hablando; si no por el contrario: Creo que la búsqueda eterna: Es el objetivo diario de mi proceder en el arte.


Es por eso que mi trabajo, sin querer ser pretencioso, se desenvuelve, libre, respetuoso, prudente, manteniendo eso sí, una identidad, una constante personal que lo identifica; y así, mi trabajo ha sido seleccionado para ser expuesto en diferentes sitios del país, al igual de ganar convocatorias en Escultura, muralismo, fotografía, pintura, diseño gráfico, poesía, escritura, intervención urbana.

Confieso que he sido feliz, y sigo en el camino, expresando el mundo interno que habita en mí.  

Ricardo Orduz Ordóñez


















No hay comentarios:

Publicar un comentario